Eso de ser poeta es una vaina dura, más si es joven y lleno de esperanzas, ilusiones y ganas de salir del fango del anonimato. El premio instaurado por la tertulia de Gloria Luz Gutiérrez, ya tiene un ganador. Desde hace diez años, sagradamente cada primer martes de mes, entre 80 y 100 personas se reúnen en casa de esta profesora de colegios distritales, quien estudió literatura y tiene una especialización en Literatura infantíl, para leer y aprender de poesía.

Este premio que comenzó llamándose, en el 2006, «María Mercedes Carranza» y que lo recibieron ese año, Patricia Ariza y Giovanni Gómez, otorga $20 millones ($10.000 dólares) de pesos al ganador, y $5 millones al segundo lugar, además de la publicación del libro en ambos casos. El de este año, fue dirigido por Federico Díaz-Granados.

El primer premio fue para Santiago Cepeda, profesor de un Colegio del Norte de Bogotá y recién egresado de la Universidad Javeriana del programa de Literatura, con el libro «Arder no ha sido luz». El segundo lugar, Andrés Betancourt, el nombre del libro no lo conozco, pero sí que vive en París y sus padres recibieron el premio.

Los jurados fueron Giovanni Quessep, Maruja Vieira, Gonzalo Mallarino y un mejicano de apellido extraño, pronto lo confirmaré. Santiago usará el dinero del premio para estudiar maestría en Nueva York. Felicitaciones a él, y esperó pronto poder publicar algunos de sus poemas.